La excelencia logística de Coca-Cola en África

¿Cómo se puede ser exitoso en un continente sin apenas infraestructuras, ni gobiernos y con continuos conflictos armados?

 

Me gustaría compartir un artículo de Marc Garrigasait en el que explica lo que considero un ejemplo de cómo no hay reto que no se pueda alcanzar si uno se lo propone y acierta con el enfoque y la estrategia.

Coca-Cola es una de las organizaciones que mejor han sabido adaptarse al continente africano, superando incluso a los gobiernos locales. Muchas organizaciones deberían a mi parecer prestar atención a su estrategia, desde multinacionales o empresas locales hasta gobiernos, asociaciones y ONG.

Coca-Cola opera en todos los países africanos, con independencia de su tipo de gobierno.

África es un continente inestable, con múltiples conflictos armados, con epidemias y catástrofes que en un abrir y cerrar de ojos pueden acabar con años de inversión. Por ello Coca-Cola apuesta por la gestión llevada a cabo por socios locales, que son quienes mejor se pueden adaptar a estas situaciones.

Bill Egbe, directivo de la compañía en Sudáfrica, explicaba que es necesario un out-of-the-box thinking, o un pensamiento creativo fuera de las normas o parámetros preestablecidos.

El modelo de franquicias con los embotelladoras es el elegido por la compañía para operar en el continente: la empresa produce el concentrado de jarabe y lo vende a sus embotelladoras franquiciadas ubicadas en distintas zonas geográficas. Éstas producen la bebida final, la embotellan en latas y botellas y luego la distribuyen.

Como he mencionado anteriormente, África es un continente complicado, por lo que a veces no es posible acceder a muchas zonas urbanas con camiones. Pero un franquiciado local tuvo una idea: crear una empresa para conseguir llegar hasta el último punto de venta en un entorno de 2 a 3 kilómetros. Para ello, se eligieron como medios de transporte la bicicleta, la carretilla de mano e incluso con burro, y si era necesario se llevaría a mano. Esta idea se puso en marcha en 1999 y se convirtió en internacional.

La compañía busca repartir el beneficio a lo largo de la cadena, para que funcione y sea sostenible a largo plazo. Un chico que reparte Coca-Cola con su bicicleta o un burro lo hace para ganarse la vida, con lo que es una parte esencial en la cadena de valor de la marca.

Todos nos preguntamos,

¿qué ocurre si se produce un brusco cambio de gobierno o un conflicto armado?

         Son los locales quienes mejores conocerán el territorio y las zonas peligrosas, por ello las compañías deben entender que l derecho a tener una licencia de Coca-Cola en el país no se gana con contactos en el Gobierno, sino con los consumidores. Para que el negocio sea sostenible, deben promover la inversión en la comunidad local donde se establezcan. Un ejemplo se da en Zambia, donde la organización Cola Life ha creado un proyecto de distribución de medicinas en las cajas de Coca-Cola aprovechando que llegan hasta el último rincón habitado, con el permiso de la franquicia local de  Coca-Cola.

Todos nos quejamos de la larga crisis por la que estamos pasando, pero viendo ejemplos como éste en el que las grandísimas dificultades que sufre el país africano, inmensamente mayores a las nuestras, se superan. Esto nos debería hacer reflexionar y ver el futuro con mayor optimismo, porque por complicados que sean nuestros problemas siempre se puede encontrar la manera de superarlos.

¿ Sé os ocurre algún ejemplo de adaptación mejor que éste?